RE-EDUCATION

 

Ven, salgamos a la noche, bebamos hasta alcanzar la madrugada; la luna es un destello y nos devora, pero todavía estás a tiempo. Ven, es espectral esta ciudad donde la vida no transcurre, ¿sucede?  La niebla adelgaza la luz esquiva de las estaciones, desliza la boca del silencio como una ocultación. Ven porque arde la Cámara Alta de los Lores, el Palacio de Invierno en los ojos de aquellos que ahora sueñan y podemos  ―¿quieres?― salir ahí, plantarles cara, orinar sobre esos rostros efigiados, subvertir ―Despreciando a la Fortuna y blandiendo un acero―  el tiempo de su escena, hacerlos frente. Más tarde, ya solos, arriesgar el horizonte de sucesos que abrigamos como una incertidumbre, desatar el firmamento, quemarlo todo.